jueves, 29 de junio de 2017

WONDER WOMAN

SUPER HEROES
Aun siendo coleccionista de clásicos, la transposición al cine de los super-heroes del comic , con alguna excepción como el primer "Spider man", no suscita mi entusiasmo. La sobre abundancia de efectos especiales y unos argumentos perfectamente inanes, me aburren en su gran mayoría.
En este caso, debo reconocer que esta precuela (seguro que habrá más) que narra los orígenes de Wonder Woman, ha logrado entretenerme. Quizá se deba a que aquí hay al menos una historia que contar que se ha reflejado en un guión bastante solido en el que no faltan las pinceladas de humor, y en la dirección de Patty Jenkins, que ha imprimido el ritmo adecuado a la narración. Además la protagonista, Gal Gadot, tiene la necesaria prestancia física y el resto de los actores cumple bien su cometido. En resumen, el producto final tiene más interés que casi todas las películas de super-héroes que tanto proliferan y que, a juzgar por los resultados, es lo único que se les ocurre a los productores de Hollywood para seguir atrayendo espectadores al cine.

domingo, 18 de junio de 2017

PARIS PUEDE ESPERAR

ELEANOR NO ES FRANCIS FORD NI TAMPOCO SOFÍA
Por culpa de una otitis, la mujer de un famoso productor cinematográfico (Alec Baldwin), se ve obligada a aceptar que uno de los socios de su marido la lleve a París desde Cannes en su coche. Lo que podría ser una "road moovie" en la que alguno o ambos protagonistas descubrieran su auténtico interior o entablaran una relación que diera un nuevo sentido a sus vidas, se transforma en una hortera excursión turística y gastronómica carente totalmente de interés. A los diez minutos de película, uno siente profundos deseos de matar al acompañante francés (Vincent Audiard) y rescatar a la pobre Diane Lane de las garras de semejante estúpido. Hay escenas de relleno y otras que suscitan vergüenza ajena. 
Eleanor Coppola, fabricante de este engendro, quizá se haya divertido rodándolo o disfrutado de buenas comidas de cocina francesa tradicional (nada de nouvelle cuisine), pero el cine es otra cosa. Solo se soporta la madura belleza de Lane y unos bonitos paisajes. No hay más.

domingo, 11 de junio de 2017

LAS CONFESIONES

POCO RUIDO, MENOS NUECES
Una reunión del G-8 en un lujoso balneario de la costa alemana del Báltico, le sirve a Roberto Andó para fabricar esta mezcla de "thriller" y cine de denuncia que nunca acaba de convencer. La inclusión de dos personajes ajenos al mundo de la economía mundial, un fraile y una escritora, no hace más que añadir confusión al mensaje que la película pretende transmitir.
Una cuidada fotografía, actores como Toni Servilio o Daniel Auteil junto con la madura belleza de Connie Nielsen, hacen lo que pueden, pero no es suficiente para superar el exceso de prosopopeya,  la artificial estética del peor Fellini y una lentitud narrativa que aburre por su reiteración. Al final, uno se da cuenta que todo ha sido un pretexto para que el fraile pueda soltar su discurso anti-globalización y, para que quede más claro, se le añade un toque angélico.

domingo, 4 de junio de 2017

NORMAN. EL HOMBRE QUE CONSEGUÍA TODO

INDIFERENCIA
No sé quien es Joseph Cedar, director y guionista de esta película, pero lo que sí sé es que ha destrozado una idea razonablemente original, potencialmente atractiva, mediante un guión confuso y estúpido y una realización nefasta que como único aliciente, tiene que recurrir a viejos trucos (superposición de imágenes, ralentis, pantallas divididas...etc.), con la intención de resolver escenas que por su planteamiento, carecen de solución. Richard Gere hace todo lo posible para dar vida a este "Don Nadie" que representa un personaje que solo existe en su imaginación y que pese a sus esfuerzos, nunca nos llega a interesar ni parece verosímil, por mucho que se vea envuelto en difusas tramas políticas internacionales, en los apuros de su comunidad judía neoyorquina o en arreglar la boda de un amigo .
La falta de diálogos atractivos, la insistencia en primeros planos, hace que el conjunto se haga pesado y reiterativo y que el final se reciba con alivio.